Los emprendedores son únicos. No solo piensan diferente: actúan diferente y encuentran la línea entre la inconsciencia y la genialidad. Pero no porque tengas ideas originales y se te ocurra cómo reemplazar la gasolina en los coches significa que estés hecho para ser emprendedor. Si alguna vez te has preguntado si serías un buen emprendedor, echa un vistazo a la siguiente lista. Puede que no tengas todas las características o habilidades, pero si tienes algunas, es una buena señal de que tienes lo que hace falta.
1. Vienes de una familia en la que no pudieron trabajar para otro. Aunque esto no es verdad para todos los emprendedores, muchos tienen una historia familiar en que uno o ambos padres son autónomos.
2. Odias el status quo. Eres una persona que siempre se cuestiona por qué la gente hace las cosas que hace. Intentas mejorar y quieres cambiar.
3. Tienes confianza en ti mismo. ¿Alguna vez has conocido un emprendedor pesimista o sin autoestima? Después de todo, si no tienes confianza, ¿cómo te creerán los demás? La mayoría de emprendedores son muy optimistas con todo lo que les rodea.
4. Eres apasionado. Habrá momentos en que pases un tiempo excesivo trabajando sin ganar dinero. Es tu pasión la que te mantiene adelante.
5. No aceptas un “no” por respuesta. Un emprendedor nunca se rinde. Nunca.
6. Tienes la habilidad de crear partnerships únicas de la nada por tu habilidad de conectar puntos. A la gente le gustas y por eso tiende a gravitar a tu alrededor; muchas veces es por tu pasión.
7. Pasas más tiempo con tu co-fundador que con tu pareja u otro ser querido.
8. Dejaste los estudios como Bill Gates, Steve Jobs y Mark Zuckerberg.
9. Viaje diario hacia la oficina: del dormitorio a la sala de estar.
10. Eres un pésimo empleado y probablemente te han despedido varias veces. No te preocupes; no estás solo. No te tomes los despidos como señal de que eres mala persona, a veces está en tu ADN.
11. Siempre te has resistido a la autoridad; por eso tienes un problema manteniendo un trabajo.
12. Crees que hay más de una definición de “seguridad laboral”: te das cuenta de que tu trabajo es seguro siempre y cuando te controles a ti mismo en vez de depender de un jefe que puede arruinar tu carrera por un error suyo.
13. Tu armario consiste básicamente en camisetas varias.
14. Eres de naturaleza competitiva; siempre buscas hacerlo todo mejor.
15. Compruebas GitHub cuando te levantas por la mañana.
16. Pides que te paguen en tickets, zapatos o lo que sea que te guste. Hay cosas mejores que el dinero ¿verdad?
17. Tu idea de vacaciones es un día laboral sin nada interfiriendo con tus tareas.
18. No puedes ser empleado y eso no tiene nada de malo. Las habilidades de la vida tienen más valor que las políticas de empresa comúnmente halladas en un horario de oficina.
19. Trabajas más de 60 horas semanales.
20. Quieres tener el control y mando de tu propia empresa. Te gusta supervisarlo todo.
21. Ves oportunidades en todos lados. Por ejemplo, entras en un edificio y tienes curiosidad sobre su valor o las empresas que hay dentro.
22. La palabra “pitch” ya no se asocia con el baloncesto.
23. Si has tomado un test de personalidad te habrá salido como resultado que eres un “tipo reformador”, alguien con propósitos, autocontrol y perfeccionista.
24. Reconoces que los mejores asientos en tus cafés favoritos son los más cercanos a puntos de venta de poder.
25. Piensas con lógica cómo resolver problemas y el conjunto de las situaciones.
26. Hablando de solucionar problemas, ¿has mirado si hay una app para eso? Puede que ya hayas empezado a crear un modelo de negocio.
27. Tienes don de gentes.
28. Mencionas y parafraseas a Steve Jobs y así también te motivas y animas.
29. Vendes las cosas como un niño en un puesto de limonada.
30. Tienes más alertas SMS de gente que sigues en Twitter que de tus amigos.
31. Empiezas solo y no te rindes hasta que no terminas.
32. No importa qué hagas en tu día, siempre piensas en términos de ROI.
33. Vistes casual y tu traje se está cubriendo de polvo. Prefieres camisetas básicas y tejanos.
34. No eres realista. Como inventor o innovador tienes que ser así.
35. Piensas fuera de la caja, sino ¿qué cambia?
36. Eres una persona carismática y encantadora.
37. Las reglas no se aplican a ti. No hablamos de quebrantar la ley, pero sí de creer en que la eficiencia y voluntad rompen las reglas.
38. Te das cuenta de que no puedes hacerlo todo solo. Tienes una idea y puedes promoverla pero sabes que no tienes todas las habilidades que hacen falta para llevar un negocio.
39. Das mucho tu opinión. Probablemente es otra de las razones por las que te han despedido alguna vez.
40. Eres impredecible. Como emprendedor, sabes cuán rápido cambian las cosas. Afortunadamente, estás preparado y esperas poder hacer cambios.
41. Te gusta estar con un grupo, pero no te encanta estar solo. Probablemente prefieras estar en grupos de más de 4 personas.
42. Eres determinado. Tienes que hacer posible lo imposible.
43. Tienes el apoyo de tus amigos y familiares. Es la gente que te entiende y estarán allí para apoyarte a lo largo del camino.
44. Es normal para ti dormir una siesta en tu mesa. Después de todo, quizás está anticuado esto de dormir 8 horas entre las 22h y las 6h.
45. Has hecho investigación de mercado. Sabes que no por tener una gran idea significa que sea aprovechable y ya has mirado qué clientes pueden comprar.
46. Te rodeas de gente de calidad, no de gente que te dejará de lado.
47. Estás un poco “out”. Tener la habilidad de crear algo de la nada requiere ser una persona que roce la locura. Recuerda, la gente pensaba que Albert Einstein estaba loco antes de probar su teoría de la relatividad.
48. ¿Alguna vez has pedido a tu familia, amigos o persona importante que te diga día y hora para hablar con ellos 5 minutos?
49. Crees que tu tiempo vale más que el dinero.
50. La última vez que te quejaste del growth hacking, tu pareja entendió de qué hablabas.
Aunque no tengas todas las características ahora mismo, probablemente las vayas desarrollando con el tiempo. Después de todo, ser un emprendedor es un estilo de vida, no un trabajo o un hobby.
