Confiar a toda costa en uno mismo, saber conectar ideas del entorno y descubrir es lo que te diferencia del resto son algunos de los principales consejos que dan los expertos para ser creativos. Unas técnicas rompedoras que, curiosamente, datan de la década de los 50.
Siempre que hablamos de creatividad pensamos en ideas rompedoras y diferentes a las que existen. Sin embargo, los principios para alcanzarla apenas han cambiado en las últimas cinco décadas ¿La prueba? Según publica el portal basepyme.es, ha salido a la luz un ensayo del bioquímico Isaac Asimov llamado “¿Cómo las personas tienen nuevas ideas?”. Un texto que llevaba oculto desde 1959 y cuyas reflexiones siguen teniendo validez casi seis décadas después.
Ser capaz de conectar cosas
Para Asimov, una de las claves de la creatividad es ser capaz de conectar ideas que aparentemente no tienen nada en común. Algo para lo que hace falta atrevimiento. Su teoría la comparten expertos como Carina Szpilka, miembro del Consejo Profesional de ESADE, quien recuerda que innovar es conectar lo que no está conectado. “No necesitamos saber, sino observar y conectar”, asegura.
Confiar ciegamente en uno mismo
“Suponer que la tierra era redonda y no plana o que se movía alrededor del sol parecía el colmo de la sinrazón”, detalla el ensayo del bioquímico. Unas palabras que vienen a reforzar uno de los consejos más repetidos en el mundo del emprendimiento: confía en ti mismo.
Lo mismo opina Ana Romero, vicedecana de la Facultad de Comercio y Turismo de la Universidad Complutense, que explica que “en la fase inicial de un proyecto, cuando todavía no se ha analizado en términos de viabilidad técnica, económica y financiera, es necesario que el emprendedor sienta la emoción suficiente como para defenderlo ante cualquiera”.
El ensayo de Asimov también insiste en que, para ser creativos, no podemos tener miedo a ser diferentes. “Algunos genios suelen ser poco convencionales en sus hábitos”, alerta su texto.
Un argumento que también defiende la psicóloga María Jesús Álava. “Cuando otros no crean en ti y piensen que no merece la pena apostar por ti, si tú crees en ti mismo, por muy difícil que sea la situación, siempre vas a encontrar una salida”, señala la experta a basepyme.es.
Buscar la inspiración en solitario
Otra de las teorías que defendía el bioquímico en su ensayo es que el proceso creativo “requiere soledad y la presencia de otras personas solo puede inhibir ese proceso”.
Estas palabras las comparte Javier Sanz, director del Máster Business Entrepreneurship de la Universidad Complutense, quien añade que “cada emprendedor debe descubrir en solitario las habilidades y competencias que le diferencian en soledad”.
Fomentar un ambiente informal
Por último, y para que verdaderamente funcione el trabajo en equipo, Asimov sentenció que el ambiente distendido “es la clave para que todos se sientan inmersos en el proceso”.
Como nos recuerda basepyme, el mejor ejemplo para demostrar la realidad de su teoría la encontramos en Silicon Valley, la cuna tecnológica a escala global, cuyo lema es work hard, play harder. “Allí la gente está muy comprometida y es hipercompetitiva”, confiesa un emprendedor español.