Hace tiempo que hablamos de Todoist. A pesar de que en los últimos años se han lanzado decenas de gestores de tareas al mercado, la apuesta por la productividad que hace Todoist sigue situándose entre las más reconocidas por empresas y profesionales. Y pese a que no es una de las empresas que hace más ruido en los medios de comunicación, sí que es una de las que ofrece un producto más sólido. En MuyPymes hemos estado trabajando las últimas semanas con la versión premium de la aplicación (22 euros al año) y estas son las principales conclusiones que sacamos.
1. La interfaz de Todoist tanto en su versión web como en sus apps sigue apostando por el minimalismo y se agradece. El poder visualizar de un vistazo todo lo que tenemos por delante sin elementos que nos distraigan es un punto a su favor. Es una tendencia que estamos viendo en otros gestores y que incluso está siendo adoptada por el otrora «complicado» Omnifocus.
2. Nos ha encantado la facilidad con la que se puede añadir una nueva tarea desde la web (transformando una URL en una tarea) y desde el correo electrónico, con un plugin para Gmail muy similar en su concepción a Google Tasks, pero muy diferente en su funcionamiento.
3. Aunque la aplicación funciona estupendamente en la web, en el terreno mobile puede y debe mejorar. Si en líneas generales el diseño está a la altura, la gestión de tareas en el terreno móvil no es tan intuitivo como nos gustaría. Y no es que sea complejo, pero sí que tiene una ligera curva de aprendizaje que no encontramos en las versiones web, sobre todo a la hora de editar tareas, añadir archivos, establecer recordatorios… son temas que en un smartphone se deberían de poder simplificar. Por otro lado siendo una app multiplataforma, echamos de menos el lanzamiento oficial de su versión para Windows Phone.
4. Todoist cuenta desde hace poco con su propio sistema de Karma. A medida que somos más productivos, completamos tareas, o trabajamos con las funciones más «complejas» como tareas recurrentes, filtros personalizados, etc. iremos ganando puntos. Si dejamos de completar tareas y se nos quedan atrasadas, los iremos perdiendo.
Además podremos acceder a un histórico de las tareas que completamos por día, semana, etc, e incluso activar un «modo vacaciones» que activaremos para no «hacer nada» y no perder Karma. Sin ser parte fundamental de la aplicación, sí que nos parece una forma interesante a la hora de motivarnos y ser más productivos, especialmente si estamos trabajando en equipo.
5. La liberación de su API, ofrece integraciones que completan la experiencia de una forma espectacular y es de agradecer el soporte para Google Drive, Dropbox o Google Maps. Sin embargo nos hubiese gustado el poder contar con una mayor integración con Evernote (como hacen por ejemplo en Nozbe). En este caso nos tenemos que limitar a crear «recetas» en Ifttt o Zapier y aunque funciona, no es la integración ideal.
6. El poder asignar tareas a otros miembros de nuestro equipo, poder imprimir una lista de tareas o convertir un proyecto en una plantilla que podemos recuperar con posterioridad, son detalles aquí y allá que completan una experiencia que en líneas generales supera el notable.
7. ¿Puede mejorar? Puede y creemos que debe hacerlo. Las apps de escritorio por ejemplo siguen demasiado la filosofía web y no aprovechan todas las características que pueden obtener de sistemas operativos como Windows o Mac OS. Creemos en ese sentido que si lo que nos interesa es una aplicación casi exclusiva de escritorio, podemos encontrar mejores opciones (Omnifocus, Things). Si en cambio lo que priorizamos es un servicio on-line al que acceder desde cualquier plataforma y con una fuerte integración de otros servicios web, estamos ante un caballo claramente ganador.
8. ¿Nuestra recomendación? Por 22 euros al año no vamos a encontrar un gestor de tareas mucho mejor. Existen servicios por supuesto que se le acercan y las versiones premium de Wunderlist o Nozbe juegan en una liga muy similar. Entra aquí el gusto personal de cada uno. En cualquier caso en nuestra opinión Todoist ofrece una experiencia casi sobresaliente.