California se convertirá pronto en el primer estado de Estados Unidos sin bolsas de plástico. La administración demócrata del estado acaba de aprobar una Ley que prohíbe a los comercios utilizar bolsas de plástico, incluidos los que se dedican a la alimentación. Todas las tiendas del estado californiano tendrán que «pasarse» a las bolsas de papel en un esfuerzo por reducir la contaminación de los océanos, donde las bolsas de plástico «campan a sus anchas», poniendo en peligro a diversas especies marinas e incluso creando su propia isla de basura en el océano Pacífico.
Se estima que la prohibición eliminará nada menos que 13 millones de bolsas de plástico al año (las de un único uso). Para ayudar a los comerciantes en su transición hacia las bolsas de papel, el estado ha preparado un fondo de 2 millones de dólares en créditos blandos. Por supuesto la industria de las bolsas de plástico no se ha mostrado precisamente de acuerdo con la nueva legislación y ha advertido que podrían perderse miles de puestos de trabajo.
El paso dado por el estado de California, considerado uno de los más progresistas del país, podría verse reflejado pronto en otros estados, toda vez que a nivel municipal ya son varias las ciudades que se están esforzando en limitar el uso de bolsas fabricadas con este material.
Europa espera reducir eliminar el 80% de las bolsas de plástico en 2019
En Europa la contaminación que producen las bolsas de plástico también ha sido recientemente, objeto de discusión y preocupación. El pasado mes de abril, los 27 países de la UE anunciaron un plan para reducir un 50% el uso de bolsas para 2017 y hasta un 80% en 2019.
Mientras que la intención parece clara, el cómo conseguirlo no lo es tanto. Todo lo que hay hasta ahora es la recomendación a los países de que tasen con más impuestos las bolsas de menos de 50 micrones (las más finas, ligeras y contaminantes), que se lleven a cabo acciones de marketing y concienciación y que para los países que así lo quieran, establezcan políticas que prohíban el uso de determinadas bolsas. De esta legislación quedarán excluidas no obstante, las bolsas que se utilizan para envasar alimentos. La iniciativa que ha sido sancionada por la mayoría del Parlamento Europeo, explica que actualmente cada ciudadano de la unión utiliza y tira una media de 200 bolsas de plástico al año.
España espera hacerlo en 2018
Si se cumplen los planes previstos por el Gobierno, la intención de España es eliminar el uso de bolsas de plástico contaminantes para 2018. El plan, que actualmente está en marcha (pagando las bolsas en el supermercado), prevé que en 2015 sea obligatorio que los supermercados y el resto de superficies que distribuyan estas bolsas tendrán que incluir en ellas «un mensaje alusivo a los efectos que provocan en el medio ambiente».
A partir de aquí los planes del Gobierno pasan por sustituir las bolsas de plástico por otras biodegradables, con la intención de alcanzar el 80% en 2016, en una iniciativa que ya cuenta con una fuerte oposición por parte de la patronal del sector. La iniciativa fue redactada por el ministerio de Elena Espinosa en 2010 y la dureza de la crisis económica y el cambio de Gobierno ha retrasado un tanto el plan inicial. No obstante a día de hoy nada hace pensar que la intención de eliminar todas las bolsas de plástico contaminantes en 2018 no se vaya a cumplir.
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