El 2013 fue el año en que anfix, la empresa española de software de gestión en la nube para pymes y autónomos, cerró con éxito su segunda ronda de financiación por un total de 4,5 millones de euros, una cantidad que se unía a los dos millones de euros con los que fue fundada en el 2010. Además, 2013 también representó un año de consolidación en el sector del Cloud Accounting al cerrar el ejercicio con una cartera de más de 17.000 usuarios activos, tres veces y media más que en 2012.
La consultora IDC reconoció en mayo de 2013 a anfix como líder del negocio del Cloud Accounting y como uno de los operadores con mejores expectativas en el sector de las aplicaciones de gestión. Un mercado, el de las aplicaciones de gestión, que mueve cerca de 500 millones de euros al año en España, de los cuales la contabilidad en la nube acaparaba en 2013 cerca de 12 millones de euros, pero que muestra una tendencia al alza con 40 millones de euros para este año y más de 100 millones de euros en 2015.
La apuesta de anfix es clara, un Escritorio Profesional en la Nube que ofrece todo lo necesario para que pymes y emprendedores españoles puedan gestionar su negocio desde cualquier lugar y con todas las garantías. Como se puede ver en su página web, el Escritorio Profesional es una página web donde cada icono representa una aplicación, hablamos de contabilidad, facturación o gestión de documentos.
Pero hay más, en el «ADN de anfix» encontramos otras características que lo diferencian de sus competidores: usuarios y empresas ilimitados (se paga lo mismo sin importar los usuarios o las empresas que se gestionen), accesible desde cualquier lugar (sólo hace falta un navegador y conexión a Internet para trabajar desde un ordenador o una tableta), soporte técnico gratuito a través de un número 900, backups diarios automáticos (para que la información esté segura en todo momento), importación de datos en Exel o CVS (en anfix se encargan de importar los datos desde otras soluciones de gestión) y formación gratuita con vídeos HD (a través del canal anfixTV).
Otra característica muy especial de anfix es su política de precios. Partiendo de un modelo de negocio tipo freemium (gratuito), no descuidan, de hecho potencian, las suscripciones premium. Para empresas de nueva constitución o con una facturación inferior a 50.000 euros al año o si se trata de un centro de formación o de una ONG, las soluciones de anfix son totalmente gratuitas, incluyendo servicio técnico sin coste alguno de lunes a viernes de 9:00 a 19:00 horas.
Si no se cumplen los requisitos anteriores, se puede optar por la suscripción «Avanza» por 9,90 euros al mes, que añade a todo lo que disfrutan los usuarios «Gratis» las siguientes prestaciones: facturación ilimitada, plantillas de facturas profesionales, edición de plantillas, aplicación para iPad, quitar el logo de anfix de las facturas, descargar datos en Excel, descarga de remesas (Q19 y Q58), adeudo directo SEPA, backup descargable mensual, soporte técnico de 8:00 a 22:00 horas de lunes a viernes y custodia de documentos.
El tercer modelo de suscripción, por 19,90 euros al mes, es el «Premium», que complementa toda la oferta anterior con backup descargable diariamente, soporte técnico en fin de semana, dashboard avanzado, codificación de plantillas de facturas, servicio de importación personalizada, histórico de datos ilimitado y un disco duro virtual de 50 Gbytes.
Los nuevos fondos obtenidos en la segunda ronda de financiación de anfix se utilizarán para potenciar el área de I+D con el impulso de nuevos productos y el área de servicios, lo que supondrá que la plantilla se duplicará a lo largo del año 2014, pasando de las actuales 25 personas a 50 empleados a finales de 2014.
Además, a través de su campaña “Rompe”, anfix dará a conocer al gran público sus productos y servicios con un lema principal: “La nueva forma de llevar las cuentas”. Diseñada por la agencia Shackleton, pone de relieve los principales valores que anfix trae al mercado. En la página web de anfix puedes ver el anuncio de TV de la campaña «Rompe», como poco te dejará impresionado.