El Instituto de la Economía Alemana acaba de publicar el ranking internacional de costes laborales, clasificación recogida por el Instituto de Estudios Económicos (IEE). El ranking, que compara datos de 44 países en el año 2012, está liderado por Noruega, con un coste laboral de 57,85 euros por hora trabajada, aumentando su distancia con el resto de países por la apreciación de su moneda frente al euro.
En segundo y tercer lugar figuran Suiza, con 46,55 euros, y Suecia, con 43,99 euros. El país más “caro” de la eurozona en cuanto a costes laborales es Bélgica ((41,91 euros), situándose a continuación Dinamarca y Alemania. En el caso alemán se produce una circunstancia un tanto peculiar, ya que en la parte occidental el coste se sitúa en 36,98 euros mientras que en los länder orientales baja a 23,57 euros.
Francia (36,77 euros) tiene un coste laboral similar al alemán, mientras que Finlandia, los Países Bajos y Austria superan los 33 euros. Japón, Irlanda y Canadá se sitúan en torno a los 29 euros. Por su parte, Estados Unidos y Reino Unido cuentan ambos con un coste laboral de alrededor de 25 euros. España ocupa el puesto 18 con un coste laboral por hora trabajada de 22,41 euros, más del doble que Portugal.
La mayoría de los nuevos miembros de la Unión Europea, como Estonia, Croacia, Hungría, Polonia, Letonia y Lituania, se sitúan en una banda de entre 8 y 5 euros. Eslovenia, Chipre, Malta y la República Checa, en cambio, tienen costes bastante más elevados. China sigue siendo uno de los países con menor coste laboral del mundo con 3,97 euros, aunque hay siete países más “baratos”, entre ellos Rumania y Bulgaria.