Jorge Calderón es CEO de U-tad, una de las universidades que más claro tiene que el futuro pasa por apoyar a proyectos emprendedores desde los centros educativos, que tienen que absorber y fomentar la cultura emprendedora.
Al hablar de todo lo que significa e implica el hecho de emprender, afirma que “se está pervirtiendo la palabra emprendedor, y además hay cierta confusión: se confunde por ejemplo el montar una empresa con tener una buena idea para un producto. Creo que en general no hay una buena preparación de base sobre lo que es ser emprendedor”.
Abunda en este extremo indicando que “una buena idea puede estar muy bien pero no basta. ¿Qué es lo que hay detrás? Hay que aprender a montar y dirigir un negocio. No conocer qué hay dentro de un negocio, cómo se dirige y se lleva una empresa es no saber emprender”.
A diferencia de algunos de sus compañeros en nuestra mesa redonda, asegura que “no hay fondos suficientes para apoyar proyectos emprendedores. Hay fondos para proyectos pequeños, pero no hay fondos disponibles si estamos hablando de inversiones de a partir de un millón de euros. Por eso creo que es necesario hacer un esfuerzo incluso desde la Administración para captar fondos desde fuera”.
Entre otras cosas porque “la distancia que no separa de Estados Unidos y otros países es casi insalvable. En Estados Unidos hay muchos capital riesgo especializado, mucho dinero disponible para nichos muy especializados y una apuesta real por el riesgo. Pensemos por ejemplo que Google compró Youtube por 1650 millones de dólares, sin tener un modelo de negocio definido. ¿Y en qué se ha convertido ahora Youtube? En España creo que los fondos de capital riesgo no tienen precisamente esa capacidad de aversión al riesgo que hay en otros países.”
Por otro lado, nos explica que el emprendedor español peca de individualista. “Colaborar, creo que es una necesidad vital. En España pecamos de ser excesivamente individualistas. Esto provoca que fracasen muy buenas ideas a las que les hace falta un acompañamiento. No tenemos una cultura de la colaboración, las empresas salen al exterior y no se plantean en realizar proyectos juntas. Creo que esto es un error.”
En cuanto a la propuesta que hoy en día se está haciendo desde la Administración afirma que “hay que diferenciar la ley del autónomo con la ley del emprendedor. No se pueden confundir los modelos. Si eres un emprendedor eres algo más. Tampoco el Estado sabe muy lo que es”.