Según refleja una encuesta de la asociación ATA entre más de un millar de trabajadores autónomos, los autónomos apenas ven avances en su batalla contra la morosidad de las administraciones públicas, éstos tienen que esperar, de media, 144 días para cobrar las facturas que les adeudan la Administración Central, las comunidades autónomas, entidades locales y empresas públicas.
Son siete días menos respecto al anterior trimestre analizado, pero aún demasiado lejos de los 30 máximos que establece la actual legislación, que transpone una directiva europea. En el caso del sector privado, el abono de las facturas con los autónomos se realiza a una media de 85 días, frente a los 60 marcados por ley.
Según la encuesta de la asociación, apenas llega al 8% el número de autónomos que cobra sus facturas dentro de los 30 días preceptivos. Para el 19,4% la espera es inferior a 90 días, mientras que el 29,2% de encuestados tarda en cobrar más de seis meses. El porcentaje más amplio (54,1%) está en el segmento de autónomos a los que se les abonan las deudas en un plazo que oscila entre los 90 y los 180 días.
Lorenzo Amor, presidente de ATA, aún confía en que el Gobierno cumpla su compromiso, expresado en una reunión mantenida el pasado mes de mayo con el ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, de aplicar de forma efectiva la Ley de Morosidad a partir de octubre. La legislación contempla que, si una administración pública no tarda en pagar más de 90 días a partir del momento en que se expide la factura electrónica, el autónomo puede dirigirse a la Agencia Tributaria para cobrar lo que se le debe, y con un interés de demora del 8%.