Si cuando empiezas un negocio te dijeran que jamás va a tener el éxito que esperas y que jamás llegarás a ser un Bill Gates, seguro que tu reacción sería la de quitarte esa idea de la cabeza y volver cabizbajo a tu horario de oficina. Vale, puede que no vayas a llegar a ser uno de los hombres más ricos del planeta, pero con mucho esfuerzo, ilusión, ganas y constancia, ¿quién te dice a ti que no puedas lograr conseguir una empresa de renombre?
Aunque siempre vemos la figura de Gates o Jobs, o Richard Branson… como grandes genios, magos de los negocios, lo cierto es que ellos para llegar donde están también se equivocaron, tropezaron, pero lo que los distingue de otros que no lo lograron, es que se levantaron y siguieron andando.
Los siguientes ejemplos deben inspirarte para seguir adelante y dar con nuevas ideas de negocios y empresas, independientemente del número de veces que hayas pensando en abandonar.
Steve Jobs. No tener ni idea de cuál es tu mercado
El fallecido Steve Jobs ya es conocido como uno de los mayores innovadores tecnológicos de todos los tiempos, y seguro que será recordado como tal por muchos y por muchas de las siguientes generaciones que están por llegar. Sin embargo, tuvo un par de errores antes de que diera en el clavo con Mac y el iPod y de que Apple se convirtiera en una marca que está presente en la mayoría de los hogares del mundo desarrollado.
Uno de sus mayores errores fue NeXT Computer. Jobs no tenía ni idea de quién era su mercado objetivo, y como tal, las características, funciones y precios no eran las acertadas. Los primeros ordenadores NeXT fueron lanzados en el mercado minorista en 1990, por 9.999 dólares.
Por tanto, si has cometido errores con un negocio o producto, no temas, Jobs luchó con Pixar y varios otros productos fallidos antes de que finalmente se convirtiera en una superestrella.
Richard Branson: Transacciones Fraudulentas
El dinero es escaso en todo el mundo, y lo era mucho más cuando Richard Branson se embarcó en su carrera de negocios en la década de los 70. Viendo una oportunidad para evadir impuestos en el Reino Unido, Branson comenzó declarando el aumento de las exportaciones a Bélgica, mientras que mantenía su inventario en el país. Fue pillado rápidamente. Branson tuvo que pagar una gran multa y hasta tuvo que pasar una noche en la cárcel.
Hay algunas lecciones aquí, pero la mayor de ellas es, probablemente, que si ves lagunas en tu idea, debes comprobar que sea legal antes de empezar a llevarla a cabo.
Peter Jones: Cero protección
Hoy, Peter Jones es un famoso multimillonario por sus apariciones en los realities americanos Dragon’s Den y American Inventor. Sin embargo, esto no siempre fue así. A mediados de la década de los 90, Jones tenía un negocio en equipo, lo hacía bien y tenía éxito. Sin embargo, Jones, al tratar de ahorrar dinero, se negó a contratar un seguro de crédito para protegerse contra los impagos de clientes.
Desafortunadamente, Jones suministró productos a un negocio sólo días antes de que quebrara. Con el seguro de crédito, Jones podría haber recuperado sus bienes, y probablemente algo de dinero de los liquidadores como una forma de compensación. En cambio, lo perdió todo.
Moraleja: Asegúrate de que tu negocio está cubierto contra todo, para salvarte en el peor de los casos. Piensa que los costes pueden ser pequeños en comparación si las cosas se ponen feas.
Errores de inicio
Incluso los empresarios y los innovadores más exitosos y respetados, han cometido errores en sus carreras. Lo que todos tienen en común, es que han aprendido de ellos y trabajaron para no volver a encontrarse en esa posición otra vez. Asegúrate, por tanto, de evitar estos tres errores específicos.