Tener copias de seguridad de nuestra información mas valiosa. Cada vez resulta más importante para las empresas diseñar una buena política de back-ups. Y no sólo basta con tener copias de seguridad dentro de la organización, sino que ante cualquier tipo de desastre, resulta imprescindible tener copias en el exterior. Os mostramos las opciones más interesantes que se nos presentan en este terreno.
Almacenamiento cloud
No sólo de DropBox vive el hombre. La oferta de almacenamiento cloud se ha disparado en los últimos años. Google Drive, Box.com, Sugar Sync, SkyDrive o Amazon son solo algunos de los servicios que pelean por ofrecernos una oferta atractiva para respaldar nuestros datos.
Aunque cada servicio tiene su propia particularidad, no difieren de lo básico: un modelo freemium que normalmente pasa por ofrecernos de 5 a 10GB de almacenamiento gratuito y diversos planes de pago en función del volumen de datos que queramos almacenar.
Online Off-Site Data Protection
Desde un punto de vista puramente técnico, los servicios que hemos visto en el punto anterior podrían entrar también en esta definición. Sin embargo hay una diferencia entre los servicios que nos ofrecen únicamente «almacenamiento cloud» o «copia de seguridad en la nube» con los que se nos ofertan como offsite backup: más seguridad e integridad de nuestro datos.
Los servicios que se engloban en la etiqueta «almacenamiento cloud» nos prometen guardar a buen recaudo nuestra información, pero en realidad contractualmente no tenemos una garantía total de que esto vaya a ser así. Y aunque en el 95% de los casos no vamos a tener problemas, cuando los hay, la recuperación de datos no es tan sencilla. De hecho ejemplos como el de Flickr (en 2011 borraron por error miles de fotos) ocurren más a menudo de lo que podemos pensar.
Las soluciones off-site nos garantizan por contrato copias redundantes, acceso securizado a nuestros datos o acceso multiusuario y como hemos dicho antes, son soluciones extremadamente seguras. Ejemplos son Iron Mountain, o Barracuda Backup. Por supuesto toda esta tecnología tiene su precio, superando fácilmente los 1.000 euros al año.
Alquilar un servidor
La llegada del cloud ha hecho bastante daño a las empresas que ofrecen el renting de servidores para realizar una copia de seguridad de nuestros datos. Sin embargo sigue siendo un mercado más o menos competitivo y puede ser muy interesante en determinados casos.
La principal diferencia con el almacenamiento cloud es que en el renting, realmente alquilamos una máquina concreta, con sus propias características. Si quisiéramos hacerlo, podríamos ver físicamente la máquina en la que se encuentran nuestros datos. ¿En qué escenarios tiene más sentido esta opción? En aquellos en los que tengamos que almacenar un gran volumen de datos que no vamos a tener que consultar de forma regular. Si todo lo que necesitamos es «archivar» información, puede ser una solución más que interesante.
Como ventaja frente a las soluciones cloud es que un posible atacante lo tiene más difícil: no sólo tiene que conocer nuestro nombre de usuario y contraseña, sino también la IP en la que físicamente se encuentra nuestro servidor.
Vaulting
Es la forma más segura y extrema de almacenar nuestros datos. Pero también es la menos práctica. Supone hacer una copia de seguridad de los mismos en una unidad externa para después, desconectar esa unidad y guardarla en un lugar seguro. Estos lugares seguros incluyen desde algo tan sencillo como la casa de un amigo, a la caja de seguridad de un banco hasta empresas que nos aseguran una vigilancia 24/7 de nuestra unidad, almacenándola en espacios protegidos frente a incendios, inundaciones y otras catástrofes. Los datos además, suelen ser encriptados.
Las tarifas de las empresas que nos ofrecen este servicio no son demasiado elevadas. Por una caja segura en la que guardar entre cinco y diez unidades externas nos van a pedir unos 200 euros al año.