WhatsApp, Line, Joyn, Viber…el mensaje es el mismo: el SMS ha muerto. Y sin embargo SMSGyan, una start-up india ha conseguido demostrar que puede que sea precisamente ahora, cuando tiene más sentido que nunca. Y es que a pesar de las antenas y los routers que nos prometen velocidades de vértigo, sigue habiendo muchas zonas rurales y países en las que la conectividad on-line brilla por su ausencia.
Es lo que cuenta Deepak Ravindram a la revista Wired. Este joven indio funda en 2011 SMSGyan una empresa que pretende convertirse en el gran Google del SMS. Para ello permite que cualquier envié un mensaje a su servicio con cualquier tipo de pregunta, obteniendo un SMS de vuelta con la respuesta.
Si le enviamos un SMS en el que preguntamos «¿Quién ha ganado el Óscar a la mejor película en 2o13?» el sistema nos dirá que ha sido «Argo». Pero también nos ayudará si necesitamos contactar con un número de emergencia o si necesitamos localizar el hospital más cercano.
Para que la mejor información llegue a sus clientes, SMSGyan ha firmado acuerdos con Wikipedia, Bing, Wolfram Alpha y otras bases de datos que tratan desde temas médicos, a transportes o resultados deportivos. Además gracias a este sistema, los usuarios pueden enviar correos electrónicos utilizando sus cuentas de Gmail y hasta actualizar su estado en Facebook o Twitter. Cada SMS que se envía la compañía telefónica se queda el 85% y el 15% restante son beneficios para SMSGyan.
La idea es tan sencilla y efectiva que ha supuesto un éxito inmediato en un país emergente como La India. En menos de dos años ha conseguido atraer a 12o millones de usuarios activos que envían sus preguntas y obtienen sus respuestas gracias a una tecnología de hace 33 años, pero que puede vivir una segunda edad dorada.
Tanto es así que esta start-up asiática está planeando expandirse a otros países como Estados Unidos, en los que no siempre hay cobertura cuando se necesita. ¿Quién dijo que el SMS ya no tenía sentido?