El presidente de la patronal española, Juan Rosell, nunca se ha mordido la lengua al frente de la CEOE. Desde que asumió el cargo en sustitución del malogrado Díaz Ferrán, ha hablado de todo y de todos. Sus palabras en muchas ocasiones han sido polémicas y en temas sensibles como la crisis económica, el paro o los sindicatos, se han convertido en trending topic y no precisamente para bien. En MuyPymes hemos querido recopilar alguna de sus declaraciones más «interesantes».
Sobre el paro
El presidente de la patronal se cubrió de gloria cuando el pasado mes de febrero, en un momento en el que la EPA apuntaba hacia los seis millones de parados, afirmó lo siguiente: «A la encuesta del INE no le doy credibilidad. La encuesta de la EPA dice que hay seis y el registro (del paro) dice cinco. Yo me creo los cinco”.
Seis meses antes, cuando todos estábamos convencidos de que España iba a ser rescatada, defendía que tal vez no era una mala idea limitar la llegada de inmigrantes a nuestro país: “durante años se abrieron las fronteras porque había pleno empleo y no se encontraba gente para trabajar. Pero ahora dar un paso atrás en una serie de cosas que hasta la fecha se podían pagar y ahora va a ser mucho más difícil»
Huelgas
No se puede negar que los dos últimos años han sido convulsos en nuestro país y la relación entre patronal y sindicatos no ha pasado por su mejor momento.
Es cierto que en un primer momento (durante su discurso de investidura), el presidente de la patronal se las prometía muy felices. Decía lo siguiente: «Hay que reacreditar la economía del libre mercado, ampliar las bases del diálogo social y construir puentes de entendimiento».
Pero la negociación colectiva no ha sido un camino de rosas. La reforma laboral y la reforma de los convenios colectivos ha derivado en dos huelgas generales. Como era de esperar, el presidente de la patronal ha mostrado su disconformidad con estas convocatorias. De la última, dijo lo siguiente: «Es inoportuna porque no es el momento de tensionar a la sociedad española, e irresponsable porque afecta directamente a la actividad económica, al empleo y a la imagen exterior de España».
Hasta aquí unas declaraciones que entran dentro de los previsible. Lo que sin embargo llamó más la atención fue cuando pensó que era una buena idea cuestionar el derecho de huelga. En este sentido, se descolgó con lo siguiente: «Hay que abordar lo más rápidamente posible el decreto de 1979 que regula el derecho a la huelga, para que por defender los derechos de algunos se estropeen y se machaquen los derechos de otros”.
La crisis económica
Sobre la responsabilidad o quién tiene la responsabilidad de la crisis económica, se ha escrito mucho. Para Juan Rosell los máximos responsables de la crisis no están claramente definidos y en sus declaraciones puede intuirse que en realidad, todos compartimos el mismo grado de responsabilidad. En julio de 2011 decía: “Había muchísimo dinero durante mucho tiempo. Se conseguía el dinero muy fácil con tipos demasiados bajos. Todos fuimos culpables».
Pero este mismo año, se muestra mucho más optimista y es más, invita a los demás a sumarse al optimismo. Y la verdad que por una vez, razón no le falta: “hay datos importantes de creación de empresas cada vez más grandes y que cada vez exportan más».
La burocracia
Uno de los aspectos que más molestan a los empresarios españoles (y con razón) es la excesiva burocracia que hay en nuestro país, tanto a la hora de abrir una empresa, como para pedir una licencia de cualquier tipo. Es normal por lo tanto que Rosell declarase en diciembre del 2012 (aunque lo ha dicho en más de una ocasión) que «la actual maraña legislativa pone tantas trabas, que hace imposible la actividad empresarial».
No obstante esto creemos que no justifica sus declaraciones sobre los funcionarios. Pese a que España es uno de los países europeos con una menor tasa de funcionarios por habitante, el presidente de la patronal siempre se ha mostrado partidario de reducir aún más su número.
Así afirmó en julio de 2012 que «es necesario realizar plan detallado para reducir el personal del sector público, con el fin de que este sector se ajuste más a las necesidades de la economía, sea más sostenible a medio y largo plazo y haya margen para reducir la presión fiscal» .
Pero no quedo ahí la cosa. En una declaraciones de este mismo año, del todo incendiarias afirmó: «¿Cuántos funcionarios sobran ¿300.000? ¿400.000?» «A lo mejor es mejor ponerles un subsidio a que estén en la Administración consumiendo papel, consumiendo teléfono y tratando de crear leyes. Eso tiene un coste tremendo».
Condiciones de trabajo
En cuanto a las declaraciones que se refieren a la actuación propia de las empresas y sus trabajadores, hay declaraciones de todo tipo. Algunas más afortunadas, como cuando dijo que » En España la economía en su conjunto, y especialmente en el ámbito laboral, es muy inflexible y hemos de dotarle de mayores grados de flexibilidad. Con todos los controles y evaluaciones del mundo que queramos, pero de mayor flexibilidad».
Otras en cambio, mucho más polémicas, como cuando se quejó de absentismo laboral: «Hay 1,5 millones de empleados faltan a diario a su puesto de trabajo sin justificación alguna», llegó a decir.
Dejamos para el final su particular reflexión sobre el despido, en unas declaraciones que estamos seguros que tendrán tantos defensores como detractores: “No hay que satanizar la salida del mercado de trabajo…Si los empresarios tienen que despedir que no tengan los impedimentos que tienen…Cuanto más facilidades demos a la salida del mercado de trabajo más posibilidades habrá de que los empresarios se atrevan a contratar”.
