En MuyPymes hemos escrito en todos estos años un buen número de artículos sobre productividad, gestión de tareas, organización en la oficina, aplicaciones, etc. El objetivo de todos esos artículos no ha sido otro que el de mostrar todas las opciones que existen a la hora de mejorar la forma en la que trabajamos, en la que organizamos nuestros proyectos profesionales y personales.
Pero una cosa es ser productivo y aprovecharnos de las ventajas que nos proporcionan todas estas aplicaciones y métodos y una muy diferente es convertirnos en esclavos de nuestra propia productividad. ¿Qué quiere decir esto? Que aunque a muchas personas les cueste creerlo, existe una adicción a la productividad, a probar cualquier app nueva en nuestro móvil, a poner en marcha cualquier nuevo método que nos promete resultados inmediatos.
En Productive Magazine se lo han tomado con sentido del humor y nos muestran con mucha imaginación, qué supone ser un esclavo de un método como el GTD (Getting Things Done), o adicto al «productivity porn»
1. Guardas tu ropa interior en 43 archivadores
2. Cuando te vas a la cama piensas…¿Cuál es la próxima acción?
3. Participas en foros en los que se discute si es más eficiente ser efectivo, o más efectivo ser eficiente
4. No te tomas demasiado bien que tus amigos cuestionen el método GTD
5. Desactivas el filtro de SPAM porque tu bandeja de entrada está vacía
6. Planificas un espacio de tiempo para jugar con tus hijos
7. Cambias de gestor de tareas cada semana
8. Te bebes una cerveza siguiendo la regla de los dos minutos
9. Tienes una lista de todas tus listas
10. Contactas con Apple para que te proporcione un kit de montaje para tu propio iPhone
