Lo hemos estado viendo: Los soprano, la mafia o, incluso, Donald Trump, son grandes inspiradores para tu negocio. Las series de televisión, en concreto, tienen mucho jugo que extraer, sólo hace falta fijarte un poco en ellas y sacar las conclusiones necesarias para mejorar nuestro negocio o decidirnos a emprender definitivamente.
En cualquier película o serie que trate sobre la superación personal está la clave, sí, incluso en una serie como Juego de Tronos podemos observar detalles y tomar ejemplos. De hecho, los retos a los que se enfrentan personajes que juegan con el poder determinarán si sobrevivirán en el Juego de Tronos, no podréis negar que esto ocurre también en el mundo laboral. Y es que, las empresas que tienen el objetivo de ocupar «el trono del poder» se enfrentan a las altas esferas, poniendo a prueba su capacidad de supervivencia.
Inspirándonos en esta exitosa serie podemos daros los siguientes consejos:
Nunca pierdas la cabeza.
Empezar a tener éxito con tu negocio puede provocar que comiences a no saber jugar bien tus cartas. Muchas veces una idea original y ética profesional no son suficientes para sobrevivir si no se sabe qué hacer con ellos. Si se revela el plan a los rivales, puedes perderlo todo, algo que aprendió Ned Stark de forma literal (y duró poco en el Juego de Tronos). Aunque el liderazgo es esencial para que las empresas tengan éxito, no hay que mostrar el plan antes de poder llevarlo a cabo o acabarás con las de perder.
Nunca te confíes
Escucha lo que te dicen los sentidos y las personas que te rodean: si un negocio parece cuestionable, no lo hagas. Durante la vida de una empresa surgen oportunidades de negocio constantemente. Por tanto, no cometas el mismo error que el Rey del Norte en el desenlace de la masacre de la Boda Roja.
Tu enemigo está al acecho. Vigílalo de cerca.
Hay que estar siempre atento a lo que hacen las compañías contra las que la empresa compite, aunque tampoco es una buena idea subestimar a los rivales, ya que ellos también pueden tener cartas ganadoras.
Estar informado es vital.
Es importante saber información sobre lo que están haciendo las empresas en el sector, especialmente si es información que puede beneficiar a tu empresa. De este modo, rodéate de vez en cuando de tipos como Meñique o Varys.
Cuidado con los enfados.
No actúes como el insoportable Rey Joffrey, los enfados y las rabietas no van a hacer a tu negocio popular. Los malos tragos que haces pasar a los demás puede hacer que tú mismo te ‘atragantes’; sin poder conseguir inversores, socios o proveedores que quieran trabajar con tu empresa.
Cuidado con apoyar a los «falsos dioses».
Las tendencias gobiernan el mundo empresarial y la demanda de los consumidores hacen que se repliquen empresas de forma continua, saturando el mercado y creando una gran competitividad y falta de opciones en otras áreas. No hay que caer bajo la presión del mercado para apoyar los ‘falsos dioses’ que prometen llevar la empresa a la gloria.
Elige a una persona de confianza.
Siempre se necesita una buena mano derecha; una persona leal, perspicaz y de confianza que puede dirigirte a ti y a la empresa en la dirección adecuada. No hay que subestimar el valor de un buen consejero, ya que uno malo puede llevar a la caída de tu imperio.
Salda siempre tus deudas pendientes.
Los Lannister tenían toda la razón: las personas que honran sus deudas y recuerdan a sus amigos se valoran más que nunca en el mundo empresarial. Las empresas y los profesionales siempre están más dispuestos a negociar y colaborar con las personas que tienen mejor reputación.
No dejes que tu familia se entrometa en tu negocio.
Si tienes algún familiar involucrado en tu empresa has de ser precavido, porque sean parte de la familia no significa que tengan las mismas motivaciones, aspiraciones ni habilidades que se necesitan para ganar el primer puesto cotizado. En contadas ocasiones la colaboración familiar funciona, pero las decepciones y los roces pueden provocar que nos distraigamos del objetivo y den paso a otros candidatos a ocupar el trono.
Usa tus armas apropiadamente.
Es imposible que una sola persona tenga todas las cualidades necesarias para llevar a cabo en solitario el trabajo de una empresa. Una buena espada, un sabio Maester o un amigo determinado son las armas más poderosas contra los muertos vivientes de más allá del muro. Lo mismo ocurre en la vida real, así que usa los recursos para poder adelantar tu negocio: contactos, familia, personas de confianza y herramientas de trabajo.