Lo han vuelto a hacer otra vez. Tras la presentación del iPhone 5 el pasado 12 de septiembre, la empresa californiana está en boca de todos, rompiendo además sus propios récords de ventas.
Pero más allá de su estrategia de marketing o la calidad de los productos que presenta, lo que sorprende a muchos profesionales es su capacidad logística, de aprovisionamiento, de control total sobre la cadena de producción.
Es lo que nos cuenta Ed Weenk, profesor y director del programa de dirección de proyectos de EADA. Para Weenk «Apple ha cautivado al mundo de la logística por su manera de hacer las cosas y se cuentan anécdotas como la de los 50 millones de dólares que destinó la empresa en su momento para reservar toda la capacidad de transporte aéreo disponible entre Asia y EEUU, o las cantidades de dinero en efectivo que ofrece a proveedores a cambio de garantías de volumen y exclusividad».
Para Weenk esta capacidad para imponer sus condiciones sobre la cadena de suministro se consigue porque «Apple tiene algo que muchas empresas no tienen: cash» y porque debido a la fortaleza de su marca y la fidelidad de sus fans, «Apple parece sufrir menos de roturas de stocks que los demás fabricantes, porque muchos consumidores esperarán hasta que llegue el reaprovisionamiento, un lujo poco visto en otros productos».
¿Dónde se encuentra su verdadero valor? ¿Qué destacaríamos de Apple en cuanto a su supply chain y las estrategias de alrededor? En primer lugar Ed Weenk destaca la visión global que ha sabido desarrollar la compañía de Cupertino. Explica que con «productos tecnológicamente punteros o con diseños bonitos no basta» sino que es necesario disponer de una «sólida estrategia operativa que logra que esos productos también lleguen a los mercados».
Existe por lo tanto una relación directa entre el diseño del producto y los aspectos de escalabilidad en grandes volúmenes de producción, con la calidad requerida y a costes aceptables, en base de competencias superiores y grandes dosis de creatividad también en temas de materiales y tecnologías de manufactura.
En este sentido, la muestra de la importancia de las relaciones con proveedores clave, sean de componentes, de comanufactura o de servicios logísticos es un aspecto muy importante. Aparentemente, Apple no sólo encanta a consumidores, también seduce a empresas suministradoras. Weenk lo resume en una frase: «suena bien tener a Apple como cliente, aunque se sepa que son extremadamente exigentes».
¿Es una estrategia perfecta?
La primera pregunta que el profesor de EADA se hace es obligada: ¿Hasta cuándo? Si el nuevo iPhone no llegase ser lo que los analistas esperan, o si finalmente ve la luz un iPad-mini y se parece más a los tablets ya existentes de otras plataformas, a lo mejor venda menos de lo que se prevé, con las claras consecuencias negativas sobre la capacidad reservada o contratada en exclusiva.
Todo puede cambiar a raíz de esto, desde la simple estructura de costes y rentabilidad, hasta la lealtad de algún que otro cliente o incluso el poder de negociación con los proveedores.
Otro tema es el de los riesgos operativos, la cadena “resiliente”, esto es la capacidad de la cadena de suministro para recuperarse rápidamente ante eventos que impactan en su desempeño. En este sentido el experto de EADA se pregunta: «¿Qué pasaría en el caso de un imprevisto importante con un proveedor clave? Problemas derivados de los terremotos en Japón, huelgas en China, complicaciones en la relación con Samsung, que es proveedor muy importante, igual que principal competidor en el ámbito de los smartphone, etc».
Para responderse a continuación que seguramente «lo tienen bien pensado en Apple, incluso diría que con un experto operativo al frente de la compañía está más que garantizado»