España ha reducido sustancialmente el tiempo que se tarda en abrir una empresa. Si en 2010 la media era de 47 días, la buena noticia es que en 2011 se tarda «únicamente» 28 días.
Según datos difundidos este jueves por el Instituto de Estudios Económicos (IEE) basados en estadísticas del Foro Económico Mundial, España se encuentra, junto con Austria, entre los países de la UE donde más tiempo se tarda en abrir una empresa, 28 días en ambos casos. Los supera sólo Polonia, con 32 días.
España se sitúa muy lejos de países como Nueva Zelanda, donde sólo se necesita un día para abrir una empresa, Australia (dos días); Hong Kong y Singapur (tres días); Bélgica y Hungría (cuatro días); Portugal (cinco días); Dinamarca, Italia y Eslovenia (seis días); Estonia y Francia (siete días), y Chipre y Países Bajos (ocho días).
Con dos cifras aparecen Grecia (diez días para abrir una empresa), Irlanda y Reino Unido (trece días), Finlandia y Rumanía (14 días), Alemania y Suecia (15 días), Letonia (16), Eslovaquia (18), Luxemburgo (19), República Checa (20) y Lituania (22).