Nuestro blog corporativo es una herramienta que puesta al servicio de la empresa, ayuda a posicionar nuestra marca, mejora nuestra comunicación (tanto externa como interna), crea comunidad y puede atraer a nuevos clientes, además de fidelizar a los que ya tenemos.
El blog corporativo es en definitiva una herramienta que debemos mimar, cuidar hasta en el menor de los detalles, porque tiene la capacidad de convertirse en la carta de presentación de nuestra empresa. En otros artículos hemos cubierto cómo cuidar la calidad de los contenidos, o cómo debemos estructurar los artículos.
En esta ocasión vamos a hablar de las métricas o dicho de otra forma, de los parámetros que nos indican cómo está funcionando nuestro blog y qué repercusión está teniendo entre nuestra audiencia. Casi todos los community managers o responsables de marketing suelen contar con una herramienta que les ayuda a medir estas métricas. Las hay muy sencillas y las hay terriblemente complejas. Sin embargo si no tenemos demasiado tiempo (o no queremos invertirlo) nuestra recomendación es que sólo prestemos atención a las siguientes:
Tráfico
El tráfico que recibe nuestra web o nuestro blog corporativo, puede medirse en visitantes únicos (IPs únicas) por mes o páginas vistas al mes. Al analizar el tráfico global de nuestra web, lo más interesante son los visitantes únicos, ya que nos indica el número de personas que efectivamente han visitado nuestra publicación.
Sin embargo si lo que queremos es monitorizar cómo se está comportando nuestra audiencia (cuantas páginas lee cada uno) o si queremos saber cómo está funcionando un artículo o grupos de artículos, el parámetro interesante es el de páginas vistas.
Fidelidad
Especialmente en los blogs corporativos, resulta más importante la fidelidad de nuestros lectores, el crear una comunidad en torno a nuestros contenidos que tener un grandísimo número de visitas que no «convierten».
¿Cómo medimos esa fidelidad? Un número alto de páginas vistas con respecto al número de visitantes únicos indica que nuestros contenidos interesan, ya que las personas que entran en nuestra web leen más de un contenido y desde luego, repiten. Por otro lado el número de comentarios que reciben nuestros artículos también es una buena forma de medir nuestra «popularidad».
Es cierto que tráfico y comentarios suelen ser dos métricas que van unidas de la mano, pero también lo es que si sabemos ocupar nuestro nicho de mercado con contenidos interesantes, obtendremos una fidelidad mucho mayor que una publicación que reciba mucho tráfico pero que se mueva en un área muy trillada (por ejemplo la tecnología) donde ya hay líderes fuertes y en la que resulta complicado diferenciarse.
Viralidad
La viralidad es otro de los componentes claves para medir la popularidad de nuestro blog. Si un contenido es interesante, es susceptible ser ser compartido en las redes sociales. El número de «me gusta», de «re-tweets» o de «+1» que recibe un artículo indica en cierta medida su contenido viral.
Pero además de conseguir un contenido viral, debemos asegurarnos que esa viralidad se consigue por los motivos adecuados. Un contenido puede ser viral porque es interesante, porque aporta algo, porque se diferencia. Pero también puede ser viral porque comete una equivocación notoria, porque la marca defrauda de forma grave a un cliente y no ofrece la respuesta adecuada, o porque resulta gracioso de una forma inquietante para la marca.
Hasta aquí los parámetros que consideramos imprescindibles si queremos hacer un seguimiento métrico de nuestro blog o página corporativa. Por supuesto podemos profundizar mucho más si así lo deseamos, e incluso podemos caer en el error de convertirnos en esclavos de las métricas.
De los tres analizados ¿Cuál es más importante? Dependerá en buena medida de nuestro target. Si nuestro nicho es realmente específico no podemos aspirar a tener un tráfico sobresaliente, ni una viralidad extraordinaria pero en cambio, si que deberíamos apostar por una gran fidelidad. Si os interesa conocer más sobre cómo funcionan las métricas os recomendamos la lectura del siguiente artículo.