Setesca, consultora especializada en la reducción de costes e incremento de la productividad y eficiencia operacional, pone de manifiesto, que el modelo en que los directivos dirigen a sus equipos está cambiando. Debido a la crisis, son muchos de ellos los que se inclinan por el modelo de gestión basado en el miedo y la amenaza.
«No veáis las noticias, ¡cómo está la cosa! ¡Cuánta gente en el paro!», «No os podéis quejar», «De momento, no tenemos previsto aplicar la reforma laboral…», son frases que, cada día, los empleados tienen que escuchar. Y cada día más, tal y como se sostiene desde Setesca.
«Sin duda nos encontramos en un entorno especialmente complejo y es una opción muy tentadora para algunos directivos dirigir a sus empleados aprovechándose de su miedo», sostiene Jordi Damià, Socio Director de Setesca a lo que añade «Sin embargo, este tipo de dirección lo único que provoca es paralizar al empleado, mermar el discurrir del talento y, por tanto, que no tome iniciativas novedosas que, probablemente, tendrían un impacto positivo en la empresa».
En la opinión de Setesca, el mejor directivo es aquel que sabe que dispone de los mejores colaboradores, y para ello debe ser exigente con el talento de su equipo, saber proteger aquel del que ya dispone y saber buscar aquel que se encuentra disponible. Premiar e incentivar los retos y los mejores es siempre más positivo que gestionar bajo amenaza.