Las empresas que promueven la actividad física entre sus empleados, consiguen que mejore su salud y su autoestima, mejoran la conciliación en el seno de la organización y además, mejoran la rentabilidad de la empresa, ya que se producen menos bajas laborales y aumenta la productividad.
Son los resultados del estudio ‘Valoración Socioeconómica del Programa de Actividad Física para los trabajadores de Mahou-San Miguel’, realizado por el Consejo Superior de Deportes (CSD) que ha analizado las actividades pioneras que, para promover un estilo de vida saludable, lleva realizando el grupo cervecero desde hace más de diez años.
Para realizar el estudio se ha tomado como base de referencia a los propios empleados de Mahou-San Miguel, comparando a los trabajadores que decidieron inscribirse al programa de actividades deportivas de la empresa con los que no y con aquellos que no practican ningún deporte. Se trataba según la empresa de «conocer los costes reales e este programa de actividad física y evaluar su retorno en términos económicos y en valores intangibles para la empresa, los propios empleados y la sociedad».
Con este análisis se demostró que el número de bajas por trabajador, la duración de las mismas y la pérdida de días al año es significativamente menor en los participantes que en el resto de la plantilla. Además, sus indicadores de salud y su perfil cardio-saludable son sensiblemente mejores.
Asimismo, los trabajadores activos en el programa percibieron y valoraron también los beneficios que éste les aporta ya que, el 94 por ciento notó una mejoría en su estado de salud y condición física, el 86 por ciento aseguró que su estado de salud psicosocial también es mejor, el 71 por ciento se notó más motivado y con una actitud más positiva en el puesto de trabajo, el 93 por ciento señaló que es mayor su satisfacción personal, individual y autoestima y el 42 por ciento dijo haber reducido el consumo de medicamentos. Por otra parte, para la mitad su esfuerzo personal para participar es limitado y el 46 por ciento considera el de la empresa como importante.
La conclusión es que el programa es muy rentable para la compañía. Mientras que el coste del mismo fue en 2010 de 220.842 euros, los beneficios obtenidos se situaron en 635.891 euros medidos, sobre todo, en indicadores como menor absentismo, mayor productividad y mejora en términos reputacionales.