Cristóbal Montoro anunció ayer que tras la aprobación de los Presupuestos Generales el próximo viernes en Consejo de Ministros, podría aprobarse una «reforma parcial en algunos grandes impuestos» con el objetivo de tener unas cuentas públicas más equilibradas.
No obstante, el Ministro de Hacienda y Administraciones Públicas ha asegurado que aunque se están estudiando nuevas medidas recaudatorias, no se va a implantar «ningún cambio tributario que perjudique el crecimiento económico y la creación de empleo».
«En nuestro proyecto político no figura la subida de impuestos permanente, no creemos que haya que subir ninguno de los grandes impuestos en España y no creemos que vayamos a salir de esta crisis con mayores impuestos, porque estamos en recesión y no podemos aplicar ninguna subida que pueda profundizar en la recesión y deprimir el consumo», reiteró Montoro, tras recordar que la subida del IRPF es «temporal».
Por otro lado, el titular de Hacienda defendió la estabilidad presupuestaria y las reformas estructurales y reprochó, en un tono muy crítico, las voces de la UE que desconfían de los planes de saneamiento de España. En este punto, se preguntó si hay alguien en Europa que puede «dar lecciones» a España sobre estabilidad presupuestaria cuando es el primer país de la UE que aprobó en 2002 una ley para asegurar el déficit cero.
También se mostró partidario de llevar a cabo una reforma de la Función Pública, y añadió que no se pueden extender «los tentáculos de la Administración Pública hasta ahogar la iniciativa privada». Así, afirmó que es preciso volver a la política de las privatizaciones, no sólo de las empresas públicas, sino también de los ámbitos «hasta ahora reservados» a la función pública.