El síndrome burnout o del «trabajador quemado» es un fenómeno del que ya hemos hablado otras veces en MuyPymes. Os hemos contado cómo en ocasiones «trabajar puede ser malo para nuestra salud» o que trucos podemos emplear para, de forma preventiva, evitar quemarnos en el trabajo.
Ahora bien, ¿Sabemos reconocer si podemos sufrir este síntoma? ¿Cuáles son los signos que lo evidencian? Aprenden a identificarlos es el primer paso para evitar quemarnos, es como un «aviso»: todavía estamos a tiempo. En LifeHack.org han recogido más de 20.
Signos psicológicos
- Sensación de fracaso. Dudamos de nuestras capacidades.
- Sentirnos derrotados, incompetentes, sin ayuda posible.
- Falta de motivación e interés en lo que hacemos (trabajo, hobbies, familia)
- Actitud negativa, impaciencia, crispación.
- No sentimos ninguna satisfacción por lo que hacemos, aunque sea bien.
- Sentimos vacío y una distancia insondable con el resto del mundo.
- Sentimos que todo se desmorona a nuestro alrededor y que no podemos hacer nada por evitarlo.
- Distracciones frecuentes e incapacidad para concentrarnos en algo tan sencillo como una conversación.
- Trabajamos más, durante más horas, pero no obtenemos ningún resultado.
- Episodios de pérdida de memoria. No recordamos lo que hemos hecho hace unos minutos.
Signos físicos
- Siempre estamos cansados. Nos falta energía y vitalidad.
- Falta de apetito, desaparece el interés por mantener relaciones sexuales, insomnio.
- No nos sentimos bien, y nos aquejamos de un mal «desconocido».
- Dolores de cabeza frecuentes, molestias en espalda y cuello. Dolor muscular generalizado.
Cambios en nuestro comportamiento
- Absentismo laboral. Llegamos al trabajo tarde como norma. En última instancia, somos despedidos.
- Aumento del número e intensidad de los conflictos que tenemos tanto en casa como en el trabaio.
- Falta de cuidado e higiene personal.
- Tendencia a aislarnos y recluirnos en nosotros mismos.
- Procrastinación extrema. Falta de responsabilidad.
- Abuso de alochol y de otras sustancias.