El ministro de Economía y Competitividad, Luis de Guindos ha señalado que el Gobierno prevé para el primer trimestre del año una contracción del producto interior bruto (PIB) superior a las tres décimas anotadas en los últimos tres meses de 2011.
Ha añadido que, según sus previsiones, España abandonará la «caída acelerada» del PIB en el segundo semestre del año, aunque mantiene que la economía decrecerá en torno a un 1,5% en 2012.
Por este motivo, el ministro ha descartado nuevas subidas de impuestos, ya que en un momento de recesión el aumento de las cargas fiscales podría afectar negativamente al crecimiento.
De Guindos ha recordado que el Gobierno espera la revisión del compromiso de déficit de la Unión Europea para elaborar los presupuestos, porque el actual objetivo del 4,4% en 2012 se basaba en una expectativa de crecimiento del 2,3%, un dato que ahora está totalmente descartado.
Respecto a la limitación del sueldo de los directivos de bancos y cajas que han recibido ayudas públicas, De Guindos ha asegurado que los que más ganan «tienen que dar ejemplo», porque «para salir de la crisis el Gobierno está pidiendo sacrificios y los sacrificios tienen que ser equitativos».
Según los datos del ministro, la vivienda terminada se vende en la actualidad con una rebaja del 35 % respecto a los precios previos a la crisis.
Sin embargo, ha apuntado que «hay muchas empresas que no han cometido excesos en la época de la burbuja del crédito y ahora se encuentran con una restricción crediticia que ven como una injusticia», algo que se pretende solucionar con el saneamiento del sector financiero.