España es uno de los países del mundo que más se ha esmerado a la hora de rebajar los salarios de los trabajadores. Así lo recoge un estudio de la OCDE en el que se indica que los costes laborales de la economía española registraron un descenso del 1,3%, una cifra que cuadriplica la media de la organización que se sitúa en el 0,3%.
La caída de los costes laborales en España durante el tercer trimestre del año contrasta con el incremento del 0,1% registrado de media en la zona euro y, de hecho, supone el mayor abaratamiento de los costes entre los países del euro analizados, seguido muy de lejos del descenso del 0,4% experimentado en Alemania.
En concreto, este fuerte descenso de los costes laborales en España se explica por el incremento del 1% de la productividad de los trabajadores españoles, el segundo mayor avance de toda la eurozona y el cuarto en el conjunto de la OCDE, así como por el retroceso del 0,3% de la remuneración, el mayor recorte entre los 33 países de la OCDE.
A nivel general, aparte de Alemania, la OCDE destaca el retroceso registrado en los costes laborales unitarios entre las principales economías, como Canadá (-0,4%) y EEUU (-0.3%), en gran medida gracias a la mejora de la productividad laboral, mientras que en el caso de Japón (-1,7%), la institución apunta el efecto técnico derivado del rebote registrado en el PIB nipón tras el terremoto del pasado mes de marzo.
En el apartado de remuneraciones, por detrás de España, Alemania registra el segundo mayor descenso (-0,2%), mientras en Canadá repuntaron un 0,1%. Asimismo, la productividad aumentó un 1,2% en Suecia y Reino Unido, mientras que avanzó un 1,1% en Finlandia.