En esta crisis no todos los sectores están viéndose afectados negativamente. Sino, que se lo digan a las empresas encargadas de gestión de cobros y relacionadas con la morosidad creciente, actividad que en 2010 ha aumentado su facturación un 8%, según los datos que maneja DBK, consultora encargada de realizar estudios sectoriales. Más de 560 millones de euros han facturado las compañías dedicadas a estos menesteres, con una cartera de clientes que han movido hasta 71.000 millones de euros.
Según DBK, filial de Informa D&B, el incremento de la dificultad de recobro ha limitado en los dos últimos años el crecimiento de los ingresos de las empresas de gestión de impagados, a pesar de que durante 2010 se apreció un aumento del grado de externalización de la actividad, derivado de la mayor carga de trabajo de los departamentos de recobro internos.
La facturación agregada de las compañías de gestión de impagados alcanzó los 560 millones de euros en 2010, tras crecer un 7,7% respecto al ejercicio anterior. Este todavía notable crecimiento contrasta, sin embargo, con el gran dinamismo registrado entre 2005 y 2009, período en el que se duplicó el volumen de negocio sectorial. Y es que la cartera de impagados gestionada por estas alcanzó un volumen de 71.000 millones de euros en 2010, lo que supuso un incremento del 16,4% frente al ejercicio anterior. No obstante, la tasa de recuperación se redujo nuevamente en 2010, hasta el 16,2% habiendo perdido casi siete puntos en sólo cuatro años.
El volumen de créditos de dudoso cobro de las entidades financieras se situó por encima de los 107.000 millones de euros a finales de 2010, un 15% más que en 2009, ascendiendo la tasa de morosidad hasta el 5,81%, más del doble que dos años antes.
A corto plazo, la cartera gestionada por las empresas especializadas seguirá creciendo a un ritmo notable, manteniendo previsiblemente tasas de variación de dos dígitos. Sin embargo, continuará reduciéndose el porcentaje de recuperación, lo que motivará una nueva ralentización del ritmo de crecimiento del volumen de negocio de las empresas del sector. Así, la facturación sectorial podría crecer alrededor del 5% en 2011, manteniéndose ligeramente por debajo de los 600 millones de euros.
Un sector que incrementa su oferta
El número de empresas presentes en el sector de gestión de impagados se incrementó ligeramente en 2010, contabilizándose unos 840 operadores. A pesar de que el citado aumento de la dificultad de recuperación de deudas y la pérdida de rentabilidad motivaron el abandono de la actividad por parte de algunas empresas, nuevas compañías siguieron entrando al sector.
El sector sigue caracterizándose por una significativa atomización, estando compuesto por numerosas empresas de pequeño y mediano tamaño, con un ámbito de actuación local. Sin embargo, destaca la sólida presencia de un grupo de principales empresas, de forma que los cinco primeros operadores absorbieron el 28% del volumen de negocio en 2010, en tanto que los diez primeros alcanzaron una cuota conjunta del 40%. La mayoría tienen su sede en las comunidades autónomas de Cataluña y Madrid, que cuentan con cerca del 40% del total nacional de empresas, seguidas por Andalucía, Galicia y la Comunidad Valenciana.
Alrededor de la mitad de las 45 compañías que DBK ha analizado recientemente en el estudio “Empresas de Gestión de Impagados” son empresas especializadas en esta actividad, mientras que el resto proceden del sector de telemarketing, de la asesoría legal y del ámbito financiero/asegurador, fundamentalmente.