Durante muchos días en MuyComputer hemos hablado del programa Yuzz, y de cómo son los centros, pero todavía no hemos hablado de lo más importante: de las personas. Hoy comenzamos una serie de artículos especiales en el que os queremos dar a conocer precisamente a estos jóvenes que han puesto su ilusión en un programa que quiere ayudarles a ser, quizás en un futuro no tan lejano, grandes empresarios.
En cada artículo de esta serie especial repasaremos la actividad que se desarrolla en seis de los centros que hemos seleccionado para la ocasión. Hoy, día que inauguramos este serial, os queremos mostrar qué es lo que están haciendo los chicos en el centro Yuzz de Valencia y lo hacemos a través de la opinión de tres de sus protagonistas: Francisco Javier Campos Verga, Rubén Blanco García y José Vicente García.
Francisco Javier Campos Verga y Rubén Blanco García: “Casi todos hablan de la crisis, pero también hay una oportunidad de negocio”
Francisco Javier Campos Verga y Rubén Blanco García son dos de los jóvenes emprendedores que se han animado a sumarse al proyecto Yuzz en Valencia. Ambos han comenzado su andadura en el mundo empresarial desde el proyecto “Yata!” su primera aplicación para smartphones. Para los que no la conozcan, Yata! es una app que ofrece información cercana al usuario en función de su localización, de modo que al abrirla el usuario no sólo puede comprobar la posición en la que se encuentra sino todo tipo de información que ha sido compartida por otros usuarios que antes pasaron por el mismo lugar. Se trata de una aplicación multiplatafora (iPhone, Android, Windows Phone 7) y para sus creadores es importante que sea muy sencilla de utilizar y que respete la privacidad de sus usuarios.
Para ellos, poder convertirse en emprendedores gracias a Yuzz supone “poder dedicarte a algo que realmente te apasiona, y aunque implica más horas y sacrificio, también implica una mayor satisfacción, saber anticiparse y adaptarse a los cambios”. Estas dos mentes inquietas han encontrado en Yuzz un espacio en el que “aprender a desenvolvernos en el mundo empresarial, a no repetir errores y saber orientarnos” y echan de menos que este tipo de formación no se extienda a otro tipo de centros: “Al contrario que en otros países como Estados Unidos, la educación española suele motivar a las personas a buscar un trabajo estable” declaran.
El trabajar en equipo, poder aportar sus propia perspectiva a otras ideas innovadoras (y que otros equipos puedan juzgar la suya) es otro de los alicientes que les ha animado a participar en Yuzz, siendo conscientes desde el primer momento de que “en el mundo empresarial cada día supone un nuevo reto”.
Dicen ser admiradores de grandes empresarios tecnológicos como Larry Page, Steve Jobs o Michael Dell porque creen en el poder innovador que tienen las ideas tecnológicas y cuando se les pregunta por la crisis, responden con la lección bien sabida: “sabemos que hay una crisis, pero también una oportunidad de negocio” aseguran.
José Vicente García: “Hay que dejar huella en el camino”
José Vicente García es otro de los participantes del programa Yuzz en Valencia. Este futuro emprendedor, admira la obra de escritores que como Leopoldo Abadía o Santiago Niño Becerra, han sabido no sólo predecir la crisis que estamos atravesando, sino saber explicarla de forma didáctica. Admira a grandes empresarios con éxito “que empezaron sin nada y sin ser nadie”, pero asegura que “más que dar nombres, me gustaría ser yo mismo y desarrollar una empresa que no solo pensase en los beneficios, sino que además aportase algo a la sociedad, que dejase huella”.
Para José Vicente emprender es llegar a saber “lo que quieres conseguir, tener ilusión”. En este sentido asegura que la idea de poder tener algún día una empresa propia es algo que le hace sentirse bien y que al participar en el programa Yuzz se ha dado cuenta de lo importante que es “estar rodeado de energía positiva y de personas con ilusión” que le ayuden a alcanzar su objetivo.
Yuzz le ha permitido además darse cuenta de lo importante que es “tener una estrategia empresarial”, de darse cuenta de que “no existe una sola vía para llegar a la meta” y que la ayuda que recibe del programa “es muy importante”. Anima a los jóvenes que están en la duda de si emprender o no a que “”sigan su corazón, que sean persistentes y constantes en lo que hacen y creen”.
Cuando habla de Pladesol (su futura empresa), un proyecto de desalación de aguas marinas que funciona con energía solar, se convence que el mayor reto que tendrá que asumir en un futuro es si podrá convertir su sueño en realidad en España o si “tendré que irme fuera del país para poder crecer, ya que el tema del agua está muy politizado”.
