La Academia Británica de Compositores y Autores (Basca) ha criticado el modelo de negocio de sitios que ofrecen música por streaming como Spotify al considerar que los pagos que reciben de estos son, en palabras textuales, «diminutos». Además, acusan a los servicios de mantener acuerdos secretos con las discográficas, por lo que no tienen posibilidades de conocer si deberían de cobrar más.
«El peligro de que estas ofertas se mantengan en secreto es que genera incertidumbre y miedo. Ésto, unido al hecho de que los pagos que se hacen a los compositores sean muy pequeños, crea sospecha, ya que no hay un rastro claro que pueda seguir el compositor para averiguar lo que debería haber recibido». Señalaba el presidente de Basca, Patrick Rackow.
Rackow, también pide a Spotify y demás transparencia con los creadores, ya que el que los pagos que reciben los compositores son tan pequeños que hace pensar que no generan dinero. Por su parte Spotify ha rehusado hacer comentarios, aunque ha asegurado que lo que se paga a los creadores varía en función del número de suscripciones y de los ingresos por anuncios.