La prensa italiana está empezando a sospechar de que Google podría emer al crimen organizado. Estas sospechas se orioginan debido a que el gigante de Internet no suministra un recorrido completo de las calles de Nápoles a través de su servicio de cartografía con imágenes reales, Street View.
Mientras que las imágenes por satélite de Google Maps ofrecen una visión íntegra de la ciudad, las de Street View, a nivel de calle, se terminan en la vía Fratelli Cervi de un lado y en la vía Labriola, del otro, lo que significa que el barrio de Scampia, suburbio de la zona norte de la ciudad y cuna del crimen organizado, queda fuera del servicio de la compañía.
Un portavoz de Google ha asegurado que esto es debido a un problema con los coches que transportan las cámaras, ya que éstos no pueden entrar en las calles por ser muy estrechas. Pero resulta que, irónicamente, se trata de calles bastante anchas en las que los vehículos de Mountain View tienen cabida perfectamente.
El diario italiano Corriere della Sera asegura que podría tratarse de «que a los clanes de la zona no les gustaría ver un coche con una cámara que lo filma todo para, después, colgarlo en la Red», pero la policía no tiene constancia de ninguna denuncia de amenazas por parte de Google. También podría tratarse de que los trabajadores que pasaran por la zona tuvieran más miedo que otros que han estado en otras zonas peligrosas del país o en «barrios animados» de otros paises, como el Bronx de Nueva York o el distrito rojo de Amsterdan y que sí han capturado las imágenes del lugar.