La economía sumergida campa a sus anchas en España. Así lo asegura un reciente informe de los técnicos de hacienda (GESTHA) apoyándose en datos como que creció en más de 25.000 millones de euros entre 2000 y 2009 o que ya representa el 23,3% del PIB nacional.
El «Informe de Economía Sumergida 2000-2009» pone de relieve cómo el importante crecimiento del fraude fiscal, unido a la caída de la actividad económica, motivaron un desplome de la recaudación tributaria de 27.362 millones hasta noviembre del pasado año.
Las partidas más perjudicadas por la crisis y el fraude fueron, precisamente, el IVA y el Impuesto de Sociedades que cayeron un 29,8% (13.677 millones de euros) y un 23,1% (6.007 millones de euros), respectivamente.
Los Técnicos de Hacienda explican que en época de crisis, lo primero que dejan de pagar las empresas cuando no pueden hacer frente a todas sus obligaciones son los impuestos, porque la evasión les origina «menos dificultades», que el impago a trabajadores, entidades financieras o proveedores.
Según Gestha, esta laxitud fiscal explica que el Estado dejara de recaudar más de 71.000 millones de euros en los últimos diez años, que es la cantidad que tendría que haber ingresado de acuerdo a la evolución del PIB y la recaudación impositiva por IVA en este periodo. Así, mientras que el PIB registró un crecimiento acumulado del 64% entre los años 2000 y 2009, las cuotas de IVA ingresadas por empresario en este último año retrocedieron a niveles de hace una década.
De esta forma, la bolsa de dinero negro aumentó 2,4 puntos del PIB en el ultimo decenio, lo que explica que aunque la economía creció a niveles históricos gracias al ‘boom’ inmobiliario, la recaudación lo hiciera a un ritmo mucho menor debido a la evasión fiscal en el sector constructor y promotor donde las operaciones especulativas de compra-venta inmobiliarias encontraron su caldo de cultivo. Gestha estima que sólo el fraude en este sector representa unos 8.800 millones de euros anuales.
Por comunidades
Las comunidades que contuvieron en mayor medida el crecimiento su economía sumergida en 2009 fueron Asturias y Extremadura, con aumentos del 0,6% y del 0,8%, respectivamente.
Por el contrario, la Comunidad de Madrid y el País Vasco fueron las dos únicas regiones que lograron reducir sus bolsas de fraude entre 2000 y 2009, y lo hicieron en un 0,8% y en un 1,2% respectivamente.