Si juntamos a un experto en Flash y una buena dosis de imaginación nos pueden aparecer cosas tan ingeniosas como la de la tienda alemana HEMA.
Arriba, la tienda on-line cuando entras y abajo, la web al terminar el Flash
Para darnos la bienvenida a la tienda on-line, la propia web comienza a jugar con los objetos que tiene destacados en la home. Una lampara ilumina una lupa que hace arder el recuadro en el que está o un triciclo hace girar un yo-yó. Llega un momento que no sólo los objetos se mueven sino que incluso el menú y el logo de la web se unen a la «fiesta» que se monta en un momento.
Vender no sabemos si venderán pero la sucesión de acciones está tan bien encadenada y el trabajo tan logrado que merece la pena echarle un vistazo y observar que todavía la tecnología tiene muchas cosas que enseñarnos.