Los cartuchos de tinta HP son algo más que un simple contenedor lleno de líquido, detrás de ellos se esconde un largo proceso de investigación y desarrollo en el que los expertos de la compañía pueden llegar a invertir varios años en su perfeccionamiento.

Con esa fuerte inversión en I+D HP consigue que sus cartuchos de tinta ofrezcan un rendimiento superior y una calidad que viene a ser sinónimo de garantía y seguridad.

Sí, esto significa que los cartuchos originales no sólo ofrecen una mayor calidad de impresión, sino que además no fallarán ni darán problemas que, por el contrario, son muy comunes en los cartuchos no originales.

Cada gota cuenta en la impresión, ya que hablamos de un proceso de alta tecnología donde cada gota de tamaño microscópico impacta en el papel a una velocidad de 50 km por hora, algo que puede ocurrir hasta 36.000 veces en un segundo.

Si el cartucho falla todo el proceso de impresión falla y por tanto nuestro trabajo se puede ver seriamente afectado en gran medida o incluso acabar dañando la impresora.

Por ello es recomendable utilizar sólo consumibles originales de HP, ya que de lo contrario nos exponemos a fallos de impresión que pueden afectar al trabajo de nuestra empresa, pero también a los gastos de la misma.