Al afrontar la elección de una nueva impresora son muchas las dudas que nos asaltan, ya que para acertar con la compra debemos tener en cuenta muchos aspectos que arrancan de la base de nuestras necesidades reales.
En este sentido una de las grandes preguntas que a veces puede ser difícil de responder es la siguiente: ¿impresora láser o de tinta en nuestra empresa? La elección depende, como anticipamos, de nuestras necesidades, pero podemos sentar un punto básico que nos ayudará en caso de duda.
Volumen de impresión
Esto es lo principal que debemos tener en cuenta. Sí nuestras necesidades van a superar las 5.000 páginas impresas al mes deberíamos considerar seriamente el láser como alternativa, ya que a partir de dicho volumen de impresión es cuando realmente se hacen patentes sus beneficios.
En esencia, con una impresora láser tendremos un hardware específicamente diseñado para soportar un volumen de impresión grande, y por tanto ofrecerá una mayor robustez y vida útil si trabajamos permanentemente con una impresión que supere las 5.000 páginas al mes.
Si por contra nuestra empresa no llega a dicho volumen de impresión lo más inteligente es optar por una impresora de tinta convencional, algo sobre lo que ya os hablamos en las dos mini-guías que os adjuntamos a continuación.
