Si queremos mantener nuestra impresora en buen estado y asegurarnos de que la misma tendrá una larga vida útil debemos seguir unas pautas mínimas centradas en la limpieza y el cuidado de la misma.
No es nada especialmente complejo y sólo requiere unos minutos pero sus beneficios se dejan notar, y dado que la impresora supone una inversión importante es recomendable cuidarla y mantenerla limpia si queremos aprovecharla durante el mayor tiempo posible .
En este artículo os enseñaremos el proceso de limpieza básico de una impresora y os daremos además una serie de consejos para cuidarla, aunque como siempre si tenéis dudas podéis dejarlas en los comentarios.
Materiales necesarios para limpiar
Empezamos desde el principio, esto es lo que vais a necesitar para la limpieza de la impresora:
- Paño de microfibra, ya que es suave y no deja restos.
- Agua para humedecer el paño y utilizarlo como base principal.
- También podemos utilizar limpiacristales para la zona del escáner si tenemos una multifunción, así como alcohol isopropílico para algunas partes internas.
- Opcional: bote de aire comprimido.
Con estos materiales nos ponemos manos a la obra, y estos son los pasos que debemos seguir:
1-Limpieza externa
Es la menos complicada, pero debemos tener cuidado. Desconectamos la impresora de la corriente y humedecemos un paño de microfibra, que utilizaremos para limpiar el exterior de la impresora.
No debemos aplicar ningún tipo de líquido de forma directa sobre la impresora y lo más recomendable es emplear un poco de agua en esa limpieza externa, aunque para la zona del escáner podemos recurrir al limpiacristales.
2-Búsqueda y retirada de restos de papel
Retiramos el papel de las bandejas de la impresora y la abrimos para buscar posibles restos de papel en su interior, siempre teniendo cuidado de no forzar ningún componente.
Si tenemos el bote de aire comprimido podemos utilizarlo para eliminar restos de papel pequeños y de difícil acceso.
3-Limpieza de rodillos y zona interna
Estas partes son las que mueven el papel por la zona de impresión, así que es importante mantenerlos limpios y en buen estado, ya que de lo contrario podemos quedar expuestos a atascos de papel.
Para limpiarlos podemos utilizar un paño de microfibra humedecido en agua o en alcohol isopropílico, pero siempre con cuidado de no forzar nada, como dijimos anteriormente.
4-Cerramos y reconectamos
Una vez hayamos terminado, y estando seguros de que todo ha quedado en orden y de que no nos hemos dejado nada dentro, ni tampoco ninguna zona mojada o humedecida en exceso, podemos rematar dando una pasada con aire comprimido para terminar de eliminar cualquier resto de polvo rebelde o de difícil acceso.
Cerramos todo, colocamos el papel de nuevo en las bandejas y conectamos la impresora para imprimir una página de prueba, ya que la misma nos indicará que todo está bien.
Consejos básicos para el cuidado de la impresora
Terminamos con un resumen en el que os dejamos una serie de recomendaciones sencillas pero importantes que debéis seguir siempre para mantener la impresora en buen estado:
- Utilizarla siempre según las indicaciones del fabricante.
- No forzar sus piezas ni partes, tanto fijas como móviles.
- No utilizar directamente sobre ella productos químicos ni líquidos de ningún tipo.
- Colocarlas en lugares elevados y en zonas limpias.
- Mantenerla limpia y evitar la acumulación de polvo.
- Usar siempre consumibles originales para evitar manchados y derrames.
Enlaces de interés: Renovación de impresoras, ¿cuándo debo hacerla?