Consejos básicos para ahorrar al imprimir

ahorrar al imprimir

Uno de los grandes objetivos que persigue toda empresa es la reducción de costes a todos los niveles que le ayude a trabajar de forma óptima y eficiente, y en este sentido los costes de impresión pueden llegar a ser muy importantes.

Por ello hemos querido hacer una pequeña guía en la que os daremos una serie de consejos para ahorrar al imprimir de forma sencilla y fácil, algo que dada la situación actual estamos convencidos de que será de ayuda para muchas pymes. Sin más entramos en materia.

  • Ahorro energético: Apagar la impresora o utilizar su modo de hibernación-suspensión puede marcar una gran diferencia en el consumo energético de nuestra pyme. Junto a esto, el hecho de usar una impresora láser también influye, ya que la misma tiene que calentar el tóner antes de empezar a imprimir, lo que supone un consumo extra frente a una de tinta.
  • Ahorro en consumibles: Realizar impresiones a doble cara y utilizar papel de calidad sólo cuando sea estrictamente necesario son dos aspectos básicos que debemos tener en cuenta antes de lanzarnos a imprimir. Junto a esto, la elección de cartuchos de tamaño XL puede ayudarnos a reducir mucho el coste por página impresión (hasta un 50%). Finalmente, el uso de consumibles originales también supone un ahorro a largo plazo, ya que la mayor calidad de la tinta alarga la vida útil de nuestras impresiones, y nos evita tener que volver a imprimir a corto plazo.
  • Ahorro con el uso de las nuevas tecnologías: Renovar nuestro parque de impresoras puede suponer también un importante ahorro a corto o medio plazo, ya que gracias a tecnologías como PageWide de HP disfrutamos de una mayor velocidad de impresión y de un consumo de tinta más eficiente, lo que se traduce en mayores flujos de trabajo y menos gastos en consumibles.
  • Reducir las impresiones innecesarias: Es importante controlar que imprimimos realmente lo necesario, evitando derroches e impresiones que no nos aporten nada. También debemos evitar el uso de la impresión a color salvo en aquellos casos que sea estrictamente necesaria y ajustar la calidad de impresión para evitar un gasto de tinta-tóner innecesario. Así, por ejemplo, en documentos internos podemos imprimir en calidad baja, mientras que en documentos para clientes la incrementaremos.
  • Gestión y control de la impresión: Esta media nos ayuda a controlar lo que imprimen nuestros empleados, de forma que nos ayuda a detectar ineficiencias y corregirlas.
  • Utilizar fuentes de bajo consumo en documentos: Una medida poco conocida pero muy eficaz, con la que podemos ahorrar una gran cantidad a largo plazo. Así, se recomienda usar fuentes como Garamond o Courier.